San Lorenzo y su vajó rendimiento

La salida de Cristian Tula, a los 28 minutos del primer tiempo, con traumatismos y mareos, es un reflejo de San Lorenzo, este puntero que bajó la guardia, una suerte de abanderado de los contratiempos. El reemplazante, Fernando Meza (defensor de los seleccionados juveniles, de apenas 18 años), hizo su presentación cuando San Lorenzo no encontraba la pelota, perdía por 1 a 0 y reaccionaba por inercia. Ellos, Tula y Meza, representaron mejor que nadie el peor escenario que San Lorenzo nunca se imaginó: de líder arrollador -por juego, por convicción- a puntero de lesiones, suspensiones, sustos y, también, bajísimas producciones individuales.

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Porque Barrientos no es el mismo, porque Bergessio no es aquel, porque Ledesma está apagado. Sin embargo, al margen de las tareas de cada uno, hay un universo de inconvenientes que San Lorenzo no puede abandonar.

De atrás hacia adelante: entre los titulares de ayer, Santiago Hirsig actuó por primera vez como lateral derecho y desde hace un par de semanas sufre una microfractura en el segundo metatarsiano en el pie derecho; el titular en ese puesto, Adrián González, ingresó los últimos minutos, con una molestia en el muslo derecho. El primer central, Tula, reemplazó a Gastón Aguirre, con cinco tarjetas amarillas.

En el medio, Juan Manuel Torres tampoco actuó por una suspensión (Acevedo jugó en su lugar). Al lado, el Lobo Ledesma sufre una fatiga muscular y, para peor, le habría dicho "sinvergüenza" al árbitro Sergio Pezzotta, sellado el partido, por no haber dado un par de minutos más; será informado y podría ser sancionado. Hasta aquí, el equipo habitual titular, con signos de su debilitamiento repentino.

¿Y en el banco? Ese lujo que tiene San Lorenzo también sufre en consecuencia. También, de atrás hacia adelante: González entró a los 23 minutos del segundo tiempo, pero sin resistencia física. Sebastián Méndez nadie lo olvida: fue operado de una sinovitis crónica en la rodilla izquierda.

En el medio campo, Ledesma, ya fue advertido, está al límite desde lo físico y, desde ayer, expuesto a una suspensión. Santiago Solari, la joya que aún es suplente, sufrió anteayer una contractura en el gemelo interno de la pierna izquierda; hasta aquí jugó poco, marcó un golazo (contra Banfield) y aportó tímidos intentos. Y en el ataque, Bernardo Romeo, el primer centroatacante elegido por Miguel Russo, se recupera de una lumbalgia postraumática. Todavía no está listo.

Lo afirma Russo, lo suscriben todos: "Hay que armar el equipo de nuevo: nos pasaron cosas impensadas". Comienza un nuevo desafío para el Ciclón. Puntero, sí, pero de los contratiempos...

1 punto de los últimos 9 logró el Ciclón: perdió con Racing 2-1, empató 1-1 con Gimnasia (LP) y cayó con Boca 1-0.